El Monasterio benedictino de San Martín Pinario en Santiago de Compostela comenzó a construirse en el último tramo del Siglo XVI, para concluirse a finales del XVIII.
Se ubica en la Plaza de la Inmaculada, muy cerca de la fachada conocida como de la Azabachería de la Catedral de Santiago.
A mediados del siglo XIX dejó de cumplir funciones de monasterio para pasar a ser en la actualidad la sede del Seminario Mayor de la Archidiócesis de Santiago, el Instituto Teológico Compostelano , la Escuela Universitaria de Trabajo Social, que depende de la Universidad Compostelana y el Archivo Diocesano.
Además de todo esto, también parte de sus instalaciones funcionan como residencia universitaria, así como diferentes dependencias eclesiásticas.
El Monasterio de San martín Pinario junto con la Catedral Compostelana están considerados los conjuntos arquitectónicos más valiosos del barroco gallego y clasificados en segundo lugar a nivel nacional (tras el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial).
San Martín Pinario fue fundado por un pequeño grupo de de monjes benedictinos, que se establecieron en el lugar de pignario tras el descubrimiento de los restos de Santiago Apóstol.
La construcción original era un antiguo oratorio dedicado a Santa María la Corticela, que fue derribado en esas fechas de finales del Siglo IX, con excepción de la capilla, que en la actualidad se encuetra integrada en el interior de la Catedral y funciona como parroquia de peregrinos
La época de mayor esplendor del monasterio benedictino podemos situarla en la última década del siglo XV al pasar a depender directamente de la congregación de Valladolid.
En el año de 1499, los Reyes Católicos fundan el Hospital Real, ( hoy Parador Nacional " Hostal de los Reyes Católicos " ).
Desde esos momentos, los monjes adquieren capacidad económica suficiente para realizar la obra del nuevo Monasterio.
CONSTRUCCION DE LA IGLESIA
Las condiciones históricas del momento, hacen difícil la realización de la obra, pues poco después del nombramiento de Juan de San Clemente como arzobispo de la diócesis compostelana ( año de 1587 ), y coincidiendo con el desastre de la Armada Invencible, así como las incursiones de piratas (entre ellos el conocido Sir Francis Drake ) , motivaron al arzobispado a tomar las máximas precauciones con la intención de evitar saqueos y profanaciones.
Las reliquias del Apóstol se ocultaron, la ciudad de Santiago de Compostela fue amurallada, etc...
Por tanto, hasta tres años después , ( 1590 ), no se proyecta la Iglesia de San Martín Pinario, que sería ya el origen del futuro Monasterio.
El diseño corre a cargo de Mateo López, el más afamado arquitecto de la época.
Por tanto , la Iglesia es el origen del Monasterio, y desde ese punto, las obras deben dirigirse en dirección a la Catedral (de Norte a Sur).
Mateo López fallece en 1606, y Benito González de Araújo continua con las obras hasta 1620 sin realizar ninguna modificación destacable sobre el diseño anterior de su predecesor.
La iglesia se construye con planta de cruz latina inscrita en un rectángulo, y con una cabecera rectangular,
Dos espacios también rectangulares a los lados que podrían ser destinados originalemente a sacristías.
También participa en la construcción Bartolomé Fernández Lechuga, que se encarga de la cúpula y de la distribución del interior dándole una gran majestuosidad.
En el Siglo XVIII se realizan la nueva sacristía, el nuevo coro y se amplía la capilla dedicada a Nuestra Señora del Socorro, Estas obras se atribuyen respectivamente a : Fray Gabriel de Casas, Fray Tomás Alonso y Fernando de Casas y Novoa.
Posteriormente, y hasta que la o bra queda totalmente finalizada y rematada , diferentes maestros aportan su granito de arena en : Peña y Toro, los ya mencionados Fray Tomás Alonso y Fray Gabriel de Casas, que realizaron además diferentes aportaciones a la fachada del monasterio, a los claustros, o el campanario y dependencias monacales, y el también mencionado anteriormente Casas y Novoa o García de Quiñones.
EL MONASTERIO
Podemos catalogarlo como un Monasterio que destaca sin embargo por su sencillez y frialdad de líneas, donde sólo destaca de forma muy notoria su fachada.
Esta fachada se divide en tres partes con un eje central flanqueado por dos grandes lienzos de cuatro pisos. La torre de cinco cuerpos contribuye a romper su monotonía. La portada barroca ubicada en el centro, con un vano de entrada adintelado, está custodiada por dos parejas de enormes columnas toscanas.
Encima se encuentra la estatua de San Benito y el balón volado.
En la parte superior destaca la estructura añadida por Fernando de Casas en 1738, con el escudo de España entre vieiras y la figura de San Martín de Tours compartiendo su capa con un pobre.
San Martín Pinario cuenta con dos claustros.
El claustro de las Oficinas ( o claustro grande ),
Fue iniciado por Bartolomé Fernández Lechuga en 1626 y concluido por Fernando Casas y Novoa en 1743. Presenta dos plantas unidas por columnas emparejadas y su concepción se separa del que presenta el claustro grande.
Tiene forma rectangular, y cuenta con seis tramos en los lados mayores y cuatro en los menores, que están separados por columnas emparejadas, que unen los dos pisos.
El claustro de las Oficinas ( o claustro grande ),
Fue iniciado por Bartolomé Fernández Lechuga en 1626 y concluido por Fernando Casas y Novoa en 1743.
Presenta dos plantas unidas por columnas emparejadas y su concepción se separa del que presenta el claustro grande.
Tiene forma rectangular, y cuenta con seis tramos en los lados mayores y cuatro en los menores, que están separados por columnas emparejadas, que unen los dos pisos.
El Claustro de la Portería o de las Procesiones, ( principal) .
Presenta dos plantas unidas por columnas emparejadas de orden toscana gigante que arrancan de una elevada base, a modo de plinto, ligeramente hundida.
La primera planta está organizada por seis arcos de medio punto y, en el superior, hay balcones de vano adintelados, con parejas de columnas dóricas de gran tamaño en los espacios intermedios. Este claustro se cierra con la torre-campanario construida al noroeste. El centro está ocupado por una gran fuente, que fue trasladado de un patio vecino. Inicialmente atribuida a Casas y Novoa, parece ser que la fuente fue construida por fray Gabriel de Casas.